martes, 19 de julio de 2011

Columna publicada en el diario Récord

                 
Reacción en cadena

Por Luis Manuel López

Yo nunca pensé que se iba a extrañar a un burócrata perfecto como Max Mosley, pero la primera gran mancha en la presidencia de Jean Todt al frente de la Federación Internacional del Automóvil, me hizo pensarlo seriamente.

Apenas la semana anterior la FIA vivió sus peores momentos en la historia reciente, cuando tuvo que admitir volver al principio con el escándalo de la restricción a los escapes sopladores. Un asunto que claramente exhibió gran torpeza del organismo a la hora de tomar decisiones importantes.
Cediendo a presiones de los equipos, se limitó el mapeo independiente del motor para calificación y se uniformizó ese sistema para los días sábado y domingo. Bien. Después, el fracaso. Se echó para atrás la limitación de aceleración bajo frenada que hace funcionar los escapes sopladores.
Todo este panorama pone a los dueños de las escuderías por encima de la FIA para negociar otros temas, en una lista donde en primer término se ha puesto la readmisión de los ensayos en medio de la temporada. Esta vez, la FIA no podrá negarse.

Todt fue incapaz de mantener control sobre la presión de los dueños, creyó que era sencillo cambiar reglamento técnico incluso con autos circulando en la pista y ahí tiene las consecuencias. Mosley, ya lo estoy viendo, hubiera aplicado burocracia a mil y todo se habría ido a la reunión de Consejo Mundial en octubre, para aprobación. En fin…

Silly season

Mientras eso ocurre, las movilizaciones laborales se volatilizaron mucho más que los gases de un escape soplador. Salieron los chismes sobre la vuelta de Kimi Raikkonen, Se confirmó a Mark Webber como escudero del campeón mundial, Robert Kubica levanta la mano y afirma que Renault le tiene guardado su lugar.

En Toro Rosso se dan literalmente a cascazos para demostrar que el sitio de piloto ‘uno’ tiene alas como para ascender a primera clase del jet Red Bull. Bajaron a Kartikeyan y subieron al australiano Ricciardo, como una verdadera amenaza.
Alguien soltó el rumor de que Schumacher ya no tiene permiso de Corina para faltar a las juntas de los niños en la escuela, y Ferrari claramente pone sus barbas a remojar para no volver a recurrir al escuadrón integrado por Fisichella, Badoer, Gene, Morbidelli, Larini, etcétera.

Ferrari llamó a Sergio Pérez y Jules Bianchi para competir en un mano a mano, en aviso claro para Felipe Massa, y no sólo eso. En Sauber también hay viento y Kobayashi declara previo a Silverstone que está en el mercado escuchando ofertas; su patrón responde: “Sabemos que hay propuestas, no por uno, sino por nuestros dos pilotos”.
Todo lo anterior me lleva a un nombre…

Esteban

El piloto mexicano de GP2 está más que listo para responder al llamado de ser un piloto de prueba que, efectivamente haga-pruebas para un equipo de Fórmula Uno y tenga absoluta capacidad para desarrollar un auto al que tarde o temprano tendrá que subir.
La mejor posibilidad es que entre los caminos de la burocracia de la FIA, se aprueben los ensayos y que se abran espacios para que los pilotos jóvenes trabajen verdaderamente por lo que fueron contratados y se cumpla auténticamente la premisa de desarrollar talento. Me parece que viene este tema en el mejor momento de la carrera de Esteban, quien comprobó con su triunfo en Valencia, que es material de primera para ascender a la máxima categoría y, lo mejor, que no tiene prisa en hacerlo.
Sino que está dispuesto a seguir un programa que le revele los secretos de los autos de F1, desde el sitio de tester. Si todo esto embona… maravilloso. Sólo faltará un punto.
¿Y después?
Detrás de Checo y Esteban hay un hueco. Es imperativo formar una escalera de talento que nos provea de al menos cuatro o cinco pilotos jóvenes con proyección a las categorías de mayor importancia en el camino a la F1, como la F3 británica y GP3.

Se especula ya que hay un fuerte candidato para subir a GP3 el año próximo. Esperemos que sea una realidad y que varios apunten la mira a Inglaterra. Las oportunidades siguen abriéndose para el talento mexicano. Sólo falta apoyarlo, pero de veras.

1 comentario:

  1. ¿que pasó con Pablo Sanchez? ¿de plano no le gustó a Ferrari?... creo que no le fue nada bien en GP3 y Esteban lo opacó totalmente.
    Pienso que en México falta mucho y para variar estamos divididos. Escudería Telmex volteó a ver a Esteban ya cuando estaba ganando en F-BMW... lo vieron mucho antes "El Plátano" Martínez y el mismo Mario Thiessen!!!... falta mucha estrategia y estructura aun...

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